El proceso de gestionar ampliaciones de instalaciones eléctricas en edificios de viviendas implica seguir normativas específicas para asegurar la seguridad, eficiencia y adecuación a los requisitos de consumo de energía. A continuación, se detallan los aspectos fundamentales para gestionar correctamente estas ampliaciones.
Consideraciones generales para la ampliación de instalaciones eléctricas
Evaluación inicial y requisitos de proyecto
Las ampliaciones de instalaciones eléctricas deben ser planificadas cuidadosamente, y en muchos casos, requieren la elaboración de un proyecto técnico. Según el Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT), la necesidad de un proyecto depende de varios factores:
- Ampliaciones de importancia: Cuando la ampliación supera el 50% de la potencia prevista en el proyecto original, se debe elaborar un proyecto nuevo.
- Revisión de la infraestructura existente: Antes de proceder a la ampliación, es esencial revisar la capacidad de la línea general de alimentación y de las derivaciones individuales, especialmente en edificios existentes, para evitar sobrepasar la intensidad admisible.
- Cumplimiento de las normas de seguridad: Todas las modificaciones y ampliaciones deben cumplir con la normativa vigente, como las Instrucciones Técnicas Complementarias (ITC-BT).
Memoria Técnica de Diseño
Para aquellas ampliaciones que no requieren proyecto, se debe realizar una Memoria Técnica de Diseño (MTD). Esta memoria debe ser elaborada por un instalador autorizado o un técnico competente y debe incluir:
- Descripción de la instalación existente y la ampliación proyectada.
- Esquemas eléctricos unifilares que detallen las nuevas conexiones y los circuitos añadidos.
- Planos y croquis del emplazamiento, cuando la ampliación sea significativa, como en el caso de la centralización de contadores o la adición de circuitos.
Procedimiento de ejecución y verificación
Ejecución de la ampliación
La ampliación debe ser realizada por instaladores autorizados que cumplan con las normativas del REBT y la ITC-BT-03. Las fases de ejecución incluyen:
- Desconexión segura del suministro eléctrico para evitar riesgos durante los trabajos.
- Actualización del cuadro de protección: Incorporación de nuevos dispositivos de protección si la ampliación aumenta la carga total de la instalación.
- Adecuación de conductores y canalizaciones: Uso de materiales adecuados según el tipo de instalación (tubos rígidos, flexibles o canalizaciones prefabricadas) y conforme a la ITC-BT-19.
Verificación e inspección
Toda ampliación debe ser objeto de verificaciones iniciales para asegurar el cumplimiento de los estándares de seguridad y calidad. Las inspecciones pueden ser:
- Iniciales: Realizadas antes de la puesta en servicio, especialmente si se trata de una ampliación importante.
- Periódicas: En edificios con una potencia instalada superior a 100 kW, las inspecciones periódicas se deben realizar cada 10 años.
Normativa aplicable
Reglamentos e Instrucciones Técnicas Complementarias (ITC)
Las principales normas y guías técnicas que regulan las ampliaciones de instalaciones eléctricas en edificios de viviendas incluyen:
- ITC-BT-04: Referida a la documentación y puesta en servicio de las instalaciones, establece los requisitos para la elaboración de proyectos y memorias técnicas.
- ITC-BT-25: Detalla las características de los circuitos en las instalaciones interiores y la capacidad de los interruptores generales automáticos, fundamentales para las ampliaciones.
- ITC-BT-26: Describe las prescripciones generales de instalación y materiales necesarios para una ampliación correcta.
Aspectos técnicos a considerar en la ampliación
Cálculo de la potencia y grado de electrificación
Las ampliaciones deben considerar el grado de electrificación de las viviendas, que puede ser básico o elevado, y calcular la potencia en función de este:
- Electrificación básica: Potencia mínima de 5.750 W, ideal para satisfacer las necesidades de uso común.
- Electrificación elevada: Potencia mínima de 9.200 W, recomendada para viviendas con grandes superficies o previsión de uso de electrodomésticos de alto consumo.
Integración de la ampliación con la instalación existente
Es esencial garantizar que la ampliación se integre adecuadamente con la infraestructura existente, prestando atención a:
- Caja general de protección y centralización de contadores: Debe adaptarse y, si es necesario, ampliarse para soportar la nueva carga.
- Derivaciones individuales: Verificar la sección de los conductores para que soporten la nueva intensidad sin riesgo de sobrecalentamiento.
Seguridad y protección
Todas las instalaciones deben estar equipadas con dispositivos de protección contra sobrecargas y cortocircuitos, así como con protección diferencial para evitar fugas de corriente que puedan poner en riesgo a las personas.
Recomendaciones adicionales
- Planificación anticipada: Es fundamental prever posibles futuras ampliaciones para minimizar la necesidad de obras de gran magnitud.
- Colaboración con organismos de control: Para las ampliaciones que implican un aumento sustancial de la capacidad de la instalación, es aconsejable consultar con organismos de control autorizados y seguir sus recomendaciones para asegurar la conformidad con la normativa.
Estos aspectos, cuidadosamente gestionados y documentados, garantizan que las ampliaciones de instalaciones eléctricas en edificios de viviendas se realicen de forma segura, eficiente y cumpliendo con los estándares legales y técnicos adecuados.